14 de julio de 2021. En la ejecución de las obras de la calle Conde de Aranda, los concejales del Partido Popular han observado que la instalación de imbornales para desaguar la calle cuando llueve torrencialmente es escasa, por lo que “se pueden causar entradas de agua en los comercios y viviendas de esta zona”, ha informado el concejal del Grupo Municipal Popular, Francisco Navarro.
El PP ha preguntado al equipo de Gobierno de Mari Carmen Moreno si se ha tenido en cuenta a la hora de replantear los niveles de la calle Conde de Aranda y la colocación de imbornales el problema de entrada de agua en los edificios y comercios existentes.
El concejal `popular´ ha detallado que “en Conde de Aranda desembocan las calles Sagasta y Joaquín Tendero, ambas vías con una pendiente considerable, que hace que ante un episodio de lluvias torrenciales el agua que converge en estas calles sea abundante y llegue de forma violenta”.
En este sentido, “la presencia de imbornales a lo largo de Conde de Aranda parece ser insuficiente”, ha destacado Navarro, a lo que ha añadido que “no hay presencia de estos mecanismos de desagüe en puntos clave para aliviar la llegada de aguas de lluvia”.
Asimismo, el concejal `popular´ ha matizado que “es lógico pensar que ante episodios de lluvia torrencial, el agua va a poder entrar fácilmente en muchos de los establecimientos y portones de viviendas, puesto que los portales de acceso a comercios y edificios se encuentra al mismo nivel de la calle”.
Navarro ha concluido haciendo hincapié en que “el equipo de Gobierno ha demostrado una vez más su incapacidad para gestionar reformas tan grandes como esta”, ya que “se deberían de haber estudiado estos problemas antes de ejecutar esta obra”. “Esperamos que ahora el Ejecutivo socialista de Moreno busque una solución a este problema que, con total seguridad, van a sufrir los vecinos y comerciantes”.