El vicesecretario de Organización del Partido Popular, Juan Lajarín, ha mostrado la sorpresa de los ‘populares’ al leer que el equipo de Gobierno socialista de Moreno ha culpado al Partido Popular del pago al que tiene que hacer frente el Consistorio aguileño por unas expropiaciones para, posteriormente, anunciar que van a incrementar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en el municipio.
Lajarín ha destacado que “una vez más, el Ejecutivo de Moreno miente a los aguileños para justificar su fracaso en la gestión económica, ya que las expropiaciones de las que hablan vienen del Plan General del año 1993, que obligaba a expropiar diferentes áreas del casco urbano. Un plan aprobado por un Gobierno socialista como el que ahora mismo gobierna”.
En este hilo, ha remarcado que “a estas expropiaciones también hay que sumarle los 180.000 euros de más que por la tozudez de este Ejecutivo los aguileños nos vamos a ver obligados a pagar, porque existía un acuerdo con uno de los propietarios desde 2018 pero el equipo de Gobierno se negó a firmarlo”, así que “tras varios litigios que el Ayuntamiento de Águilas ha perdido, ahora tendrá que expropiar según el acuerdo y pagar 180.000 euros de más relativos a costas e intereses de demora”.
A su vez, el vicesecretario ha recordado que “el remanente de Tesorería es una garantía de solvencia del ayuntamiento para hacer frente a asuntos extraordinarios que puedan surgir, pero este equipo de Gobierno lo exprime al máximo para hacer frente a pagos comunes que no se reflejan en los presupuestos”.
En este sentido, ha subrayado que “no pueden culpar al Partido Popular y al encarecimiento del coste de los contratos públicos de la subida del IBI para el ejercicio 2025, porque en los últimos años los costes se han visto incrementados pero los servicios no son mejores que antes”.
Hay que hacer hincapié en que “vuelven a mostrar su incompetencia porque los aguileños pagamos más y los servicios públicos que recibimos son precarios como la limpieza. Además estamos haciendo frente a más contratos menores que pueden parecer una solución rápida pero a largo plazo no garantizan la calidad y continuidad de estos servicios públicos”.
Al igual que, “tampoco podemos ignorar los desfases en las obras por su ineptitud y mala planificación como la piscina municipal, el edificio de Dinamización Social o el Aula de Estudio 24 horas”, ha concluido Lajarín.